En la
Cueva de la Sima del Elefante se han localizado códigos morfológicos líticos,
es decir, útiles de piedra fabricados por los homínidos en todo el conjunto del
relleno. Esto nos indica que actuó como a tractor y que fosilizó la presencia
humana en la Sierra de Atapuerca (Burgos) Es probable que tengamos reflejado en
este relleno 1 millón de años de evolución tecnológica del género Homo. Las
rocas que los homínidos del Pleistoceno inferior, que ocuparon o vivieron en
los alrededores de la Sima del Elefante, utilizaron para hacer sus herramientas
se caracterizan por la poca diversidad de la materia primera, básicamente sílex
de origen neógeno, cretácico y
calcáreas. La representación de las cadenas operativas nos habla de
instrumentos trasportados de manera individual y ausencia de trabajo in situ,
al menos para los objetos que han sido tallados sobre sílex.
Una de las piezas de industria lítica halladas en la Sima
del Elefante - IPHES
Por lo que se refiere a las calizas se debería continuar el
estudio de las mismas, dado que pueden existir usos expeditivos de este
material en el exterior o interior de la cueva en primera fase que aún no han
sido evaluados. La dificultad para individualizar las calizas rotas de forma
natural o lascas producidas por caída de bloques de las talladas de manera
intencional, impide en algunos casos saber si hubo uso sistemático de este material por parte de homínidos que
necesitaban filos para la obtención de biomasa animal de forma preferente, como
así lo indican las marcas de corte encontradas en extremidades y cráneo de
mamíferos entre las que destacan las existentes en los taxones atribuidos a
homínidos.
La diferencia que observamos en relación con los niveles de
la base de Gran Dolina es que en la Cueva de la Sima del Elefante no se han
localizado herramientas talladas en cuarcita o arenisca. Un hecho que
consideramos importante dado que las dos cavidades se encuentran cerca una de
la otra y sería normal que en una antigüedad parecida se hallara la misma
diversidad en el uso de materiales.
MARCO GARCÍA LATRE
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